24 horas en Bogotá, Colombia

Tal vez algunos recuerden esos pasajes alucinantemente baratos que salieron a la venta el año pasado para ir a Cancún o a Habana por Avianca. Como buenos promo-fans, nosotros compramos ambos. La “negativa” que tenían los que iban a Cuba era que tenían escalas de casi 24 horas en Bogotá. Nosotros tomamos esta cuestión como una oportunidad -no como un problema- y nos propusimos salir a visitar la ciudad durante este tiempo (no hay que pagar gasto extra para salir o entrar nuevamente al aeropuerto).

Reservamos por Airbnb un cuarto barato y céntrico que nos habían recomendado: para el caso importaba más la ubicación que las prestaciones. Nuestras valijas las retirábamos directamente en Habana, por lo que estábamos con una mochila mediana con una muda de ropa, la cámara de fotos y algunas cosas de higiene.

Para ir a la ciudad teníamos tres opciones: colectivo, taxi y uber; nosotros tomamos la última (que no era ni la más barata ni la más cara) y pagamos unos us$7,50 entre dos.

Nuestro host de Airbnb nos había proporcionado una guía con 20 puntos turísticos, algunos de los cuales entraron en nuestro recorrido.

Caminata desde las Torres del Parque hasta La Candelaria

Arrancamos nuestra caminata en las Torres del Parque, un conjunto de viviendas que se construyeron rodeando una plaza de toros, todo sobre un parque con grandes desniveles.

Inmediatamente, nos asombró algo muy bello que tiene Bogotá que son sus drásticos cerros; los mismos se ven al fondo de las calles dejando muy lindas perspectivas para las fotos.

Luego nos caminamos hacia el sur por diferentes calles en pleno centro hasta llegar a La Candelaria, un barrio central con algunos edificios históricos, una peatonal comercial y mucha gente caminando. Un amigo nos contaba que “aquí la gente camina mucho, se junta con sus amigos y arranca a caminar.” Por lo experimentado, fue bastante cierto.

Museo de oro

Está ubicado dentro del recorrido anterior. Es uno de los museos más visitados de Colombia, cuenta con una colección magnífica de piezas de oro de Colombia y partes de latinoamérica, y de diferentes períodos de la humanidad. Súper recomendable.

Comida callejera

Algo que nos llamó inmediatamente la atención era la cantidad de comida callejera “diferente” a lo que los argentinos estamos acostumbrados. Cual nene con juguete nuevo: probamos todo (desde arepas hasta té de hierbas) y estaba exquisito. Vale aclarar que, incluso en el restaurante local donde nos sentamos a comer, la comida es muy económica.

Compras en Shopping Mall Multiplaza

Favorecidos también por el cambio, el buen precio y la disponibilidad de las marcas internacionales que tiene Colombia nos decidimos a hacer algunas compras. Como teníamos poco tiempo, decidimos centralizarlas en el shopping Multiplaza, y fue una buena idea porque tiene gran variedad y está más o menos camino al aeropuerto.

A modo de cierre de estas 24 horas en Bogotá

Las 24 horas en Bogotá fueron tan inesperadas como bien disfrutadas. La ciudad está bien cuidada y superó nuestras expectativas. Por supuesto que fue una visita atípica y fugaz, pero abrió las puertas a pensar en un viaje recorriendo el resto del país.

Volemos a Bogotá